Industria farmacéutica, protagonista de nuevo modelo económico
Eje estratégico del desarrollo económico

Breves Industria Farmacéutica
El nuevo Plan México coloca a la industria de la salud como eje estratégico del desarrollo económico. El gobierno federal impulsará la producción nacional de medicamentos y equipos médicos, con incentivos fiscales, simplificación regulatoria y nuevas reglas en compras públicas.
Misael Macías
En un giro decisivo hacia la autosuficiencia productiva, la primera mandataria Claudia Sheinbaum presentó el ambicioso Plan México, una estrategia que busca no solo reducir la desigualdad, sino también blindar al país frente a futuras crisis sanitarias. Con este plan, la industria farmacéutica y de dispositivos médicos se convierte en protagonista de un nuevo modelo económico basado en la innovación, la producción nacional y el bienestar colectivo.
Desde el Museo Nacional de Antropología (MNA), acompañada de su gabinete, empresarios, comunidades originarias y gobernadoras, la titular del Poder Ejecutivo anunció una serie de programas enfocados en fortalecer el mercado interno. Entre ellos, destacó la necesidad de alcanzar la soberanía sanitaria mediante el impulso a la fabricación local de insumos médicos y la reducción de la dependencia de importaciones.
Uno de los anuncios más relevantes fue el del Programa 7, que propone aumentar la producción nacional del sector salud mediante dos herramientas clave: la simplificación administrativa de Cofepris y nuevas condiciones en las compras públicas, las cuales exigirán que los productos sean elaborados en México. Esta nueva norma entrará en vigor en la próxima licitación de medicamentos, programada para 2026.
Transformación regulatoria para innovación
Por supuesto, el componente regulatorio del plan también contempla cambios sustanciales: trámites serán sustituidos por avisos, se agilizarán los protocolos de investigación clínica y se reformará la Ley del IMPI para acelerar el registro de patentes. Esta transformación apunta a eliminar barreras históricas que han frenado el desarrollo farmacéutico nacional.
De esta manera, el gobierno federal buscará crear un ecosistema donde converjan la manufactura, la ciencia y la salud pública. Para ello, se prevé la instalación de polos industriales con beneficios fiscales —a licitarse el 19 de mayo— y el lanzamiento de una Ventanilla Digital de Inversiones el 21 de abril. Ambos mecanismos buscan facilitar la creación de plantas farmacéuticas y de dispositivos médicos en territorio nacional.
Certidumbre, inversión y soberanía productiva
Durante la presentación, la mandataria estuvo acompañada por figuras clave de su gabinete, entre ellos Marcelo Ebrard, secretario de Economía; David Kershenobich, secretario de Salud; y Rosaura Ruiz, titular de la Secretaría de Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación. Todos coincidieron en que esta estrategia abre una nueva etapa de certidumbre, diálogo y colaboración con el sector productivo.
Así, las próximas semanas serán cruciales: el 14 de abril se enviará al Congreso la iniciativa de reforma al IMPI; el 19 de mayo se licitarán los polos industriales; el 21 de abril se lanzará la Ventanilla Digital de Inversiones; y el 28 del mismo mes se publicarán los decretos que transformarán la operación de Cofepris y el esquema de compras públicas. Además, se prevé la apertura de líneas de crédito para mipymes del sector salud.
Producción local, salud nacional
Este conjunto de acciones marca un antes y un después para la industria farmacéutica en México. La apuesta es clara: producir lo que se consume en el país, desde medicamentos genéricos hasta tecnologías médicas avanzadas, con reglas claras, procesos simplificados y apoyo institucional. La soberanía sanitaria ya no es un ideal, sino un objetivo con ruta definida.