Persisten retrasos en la importación y registro de medicamentos
Jorge Arturo Castillo
La industria farmacéutica en México se encuentra inmersa en una crisis que no sólo afecta su economía sino también la salud de la población. Los prolongados retrasos en la importación y registro de medicamentos por parte de la agencia sanitaria mexicana están generando un impacto significativo en la disponibilidad de tratamientos, encareciendo costos y dificultando la distribución de fármacos esenciales.
Tiempos de espera prolongados
Los tiempos para la importación y registro de medicamentos en México se han extendido alarmantemente, triplicándose en algunos casos. Antes de la pandemia de Covid-19, la importación solía tomar alrededor de 45 días, pero ahora los tiempos han aumentado a un rango de 120 a 150 días . Más alarmante aún es el proceso para obtener un registro sanitario, que puede tardar más de 900 días, en contraste con el estándar de 60 días en economías avanzadas .
Luis Lazzarini, gerente comercial de Grupo Somar, señaló que estos retrasos no sólo elevan los costos operativos, sino que también obligan a las empresas a realizar inversiones adicionales para anticipar pagos y asegurar la llegada de medicamentos mediante costosos envíos aéreos .
Deficiencias en innovación y coordinación institucional
La falta de innovación en medicamentos en México es una preocupación que va más allá de los simples retrasos. Larry Rubín, director de la Asociación Mexicana de Industrias de Investigación Farmacéutica (AMIIF), advierte sobre una notable carencia en la introducción de nuevos fármacos. Esta situación se ve agravada por la obsoleta infraestructura digital de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris).
De esta manera, la necesidad de digitalizar procesos y mejorar la coordinación con el Instituto Mexicano de la Propiedad Intelectual (IMPI) es imperativa para garantizar una mayor certeza jurídica en la emisión de registros sanitarios y patentes .
Esfuerzos y colaboración internacional
Cofepris ha comenzado a tomar medidas para mitigar estos problemas. En 2024, la comisión resolvió más de 20 mil solicitudes de permisos sanitarios de importación, implementando procesos más eficientes y transparentes . Sin embargo, la situación sigue siendo crítica. La Oficina de Representación Comercial de Estados Unidos (USTR) ha señalado que en México los retrasos pueden alcanzar hasta dos años para el registro sanitario de medicamentos y equipo médico.
Una posible luz al final del túnel es la colaboración entre Cofepris y la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de Estados Unidos. Esta alianza busca identificar maneras de mejorar el proceso de análisis y reducir los tiempos de registro, permitiendo un acceso más rápido a medicamentos seguros y eficaces .
Un camino de retos y oportunidades
La industria farmacéutica mexicana está enfrentando un reto monumental que afecta directamente la calidad de vida de millones de personas. A medida que los costos aumentan y la distribución se ve comprometida, la colaboración entre organismos nacionales e internacionales y la adopción de medidas más eficientes se presentan como soluciones viables.
Es fundamental que México acelere la modernización de sus procesos regulatorios y fortalezca la coordinación entre instituciones. Sólo así se podrá garantizar un acceso adecuado a medicamentos de calidad, respondiendo no sólo a la demanda del mercado sino también a la necesidad urgente de salud pública.