¿Cómo vive una médica venezolana en un país como Alemania?
Columna Vida Médica
Para los médicos que quieren trabajar en el extranjero no es fácil homologar su título y, si además quieren desarrollar una especialidad, como fue mi caso, las complicaciones aumentan. En mi opinión, Alemania es uno de los mejores sistemas sanitarios del mundo y ofrece grandes oportunidades para los médicos extranjeros.
Angie Bru*
La demanda de profesionales de la salud está creciendo en todo el mundo. Según un estudio reciente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), en toda América Latina y el Caribe se necesitarán tres millones de médicos y ocho millones de enfermeros para el año 2040.
Esto podría considerarse una buena noticia para los médicos latinos, somos muy necesarios, como en cualquier parte del mundo, sin embargo no en todas las regiones se nos valora. El citado estudio del BID registra también que en América Latina sigue existiendo una gran brecha salarial entre hombres y mujeres dedicados a la salud.
Esto no sucede en países del norte de Europa, donde un médico con la misma experiencia o trabajando en la misma especialidad tiene las mismas condiciones de trabajo, salario y prestaciones sociales, sea hombre o mujer. Además, los sueldos de estos profesionales son muchos más altos que en América Latina.
Por razones como esta, quise comprobar por mí misma si como médico encontraría buenas oportunidades en Europa.
En Venezuela, sueldos muy bajos
Cuando me gradué en Venezuela quería hacer la especialidad de pediatría, pero en mi país los posgrados tienen sueldos muy bajos. Decidí entonces probar en España, y tras realizar el examen MIR, que es el examen para entrar a la especialidad médica, me di cuenta de que no tendría la oportunidad de hacer la especialidad que había soñado.
De hecho, durante el primer año no me fue posible obtener una plaza para especialidad, por lo cual tuve que esperar otro año para volver a presentar el examen. Todo ese tiempo estuve desempleada, porque no me fue posible encontrar un empleo como médico, y además, tenía que preparar el examen MIR. El segundo año logré obtener una plaza como residente, pero aun no estaba contenta, porque no era el área donde yo había querido formarme como especialista.
Quizá no fue casualidad que en un viaje a Alemania en el 2012, un médico alemán, dueño de varias clínicas, me explicara la situación del país germano, donde se estaban necesitando muchos médicos.
En Alemania, un sueldo siete veces más alto
Me di cuenta que podía homologar mi título, hacer la especialidad de mi elección, y además, ganar un sueldo siete veces más alto que el de España. Yo estaba ganando 1,000 euros mensuales como médico residente en la Madre Patria y, después de homologar, empecé a trabajar en Alemania ganando un sueldo de 7,000 euros mensuales.
La barrera más grande era el idioma, pero nunca tuve miedo o dudas. El desafío me encantó y lo asumí desde ese mismo día, cuando supe que era posible ejercer en Alemania. Así que me puse a aprender la lengua germana y lo conseguí.
Trabajo y vida, vida y trabajo
En 2016 por fin pude ejercer en pediatría y con mejores condiciones que nunca, de trabajo y de vida.
Y esta alta demanda de profesionales de salud va en aumento. Para 2030, según la consultora PwC, se estima que harán falta cerca de un millón de profesionales de toda la rama sanitaria, y habrá 165 mil plazas de médicos por cubrir.
Ayudar a más médicos inconformes
Al compartir mi historia llegué a más colegas de profesión. No pensé que el blog donde conté mi experiencia tendría esa repercusión, pero otros médicos me escribían y me pedían ayuda con su proceso migratorio, así que empecé a asesorarlos.
Eso me llevó a la creación de una academia y un equipo. A día de hoy tenemos inscritos en nuestra academia a más de 2.000 profesionales sanitarios que quieren trabajar en Alemania.
El proceso migratorio no es fácil, pero para mí estuvo muy claro tomar la decisión, porque quería apostar por un país donde tuviera oportunidades reales de entrar al sistema de salud.
Acá se valora a los médicos
En Alemania, una vez se homologa el título se puede trabajar en gran cantidad de hospitales, y además, con buenas condiciones, porque se valora a los médicos.
Y no se trata sólo de hacer carrera, sino de desarrollar un proyecto de vida junto a la familia. Y esto solo se logra con un sistema social que apoya a la familia y establece condiciones de trabajo donde el profesional se siente valorado y también tiene espacio para su tiempo libre.
Vivir la experiencia en Alemania
Para los médicos, en el país germano, es posible compatibilizar la vida familiar y laboral.
Recomiendo a todo médico vivir una experiencia en Alemania y conocer en primera persona los avances de este país, sobre todo en el sistema sanitario y en la calidad de vida. Solo así podemos ampliar nuestras perspectivas y seguramente, empezar a transformar nuestros sistemas de salud latinoamericanos.