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Por una “República Sana” y ¿Birmex?

Los objetivos y planes de la “República Sana” podrían verse comprometidos ante la continuidad en el problema del abasto al concentrar en la dicha paraestatal la totalidad de las compras de las tres principales instituciones de salud para los próximos años, lo que es del todo delicado trabajar de manera estratégica el modelo de abasto en donde podrá ser de mucho valor tener una mayor colaboración con el sector privado en temas de logística.

Enrique Martínez Moreno

El próximo gobierno, que encabezará Claudia Sheinbaum Pardo, tendrá entre sus responsabilidades garantizar un sistema de salud funcional, donde el acceso a los servicios y medicamentos sea efectiva y puntual. En su proyecto “100 pasos para la Transformación”, que presentó al inicio de su campaña presidencial, salud destaca como uno de su ejes relevantes, en donde hace la apuesta de contar con la suficiente infraestructura y con el abasto de medicamentos pleno, de manera que centre en impulsar esfuerzos en la prevención y en una mejor cultura de la salud.

Dicho documento se plantea como una hoja de ruta que dé continuidad a la transformación del país a través de un plan ambicioso. Reconoce que con la administración de López Obrador hay diversos logros en el ámbito de la salud, tales como:

La creación del Organismo Público Descentralizado (OPD) IMSS-Bienestar, que ha integrado la infraestructura de los Servicios Estatales de Salud (SESA) de 23 estados -y que seguramente cerrará el sexenio con algunos otros más-, en donde se otorgue una mayor cobertura y calidad en la atención médica.

Renovar o ampliar

La inversión en la recuperación y puesta en uso de infraestructura “abandonada” en los estados, con una inversión que rebasa más de 23 mil millones de pesos para renovar o ampliar camas, quirófanos, consultorios y equipamiento entre las unidades médicas  de los tres niveles trasladas al OPD, según los acuerdos firmados.

También destaca la implementación de un modelo de atención primaria a la salud – llamado Modelo de Atención a la Salud para el Bienestar, “MAS-Bienestar”-, centrado en la prevención y la atención integral de la persona y la comunidad.

A lo anterior se suma, señala el documento, la creación del Compendio Nacional de Insumos para la Salud (CNIS), sustituyendo el antiguo cuadro básico, a partir del 30 de abril de 2020. Con ello pretende ampliar las opciones terapéuticas con nuevas presentaciones de medicamentos genéricos, así como de nuevas moléculas.

Falta de atención oportuna

También asegura que se ha mejorado la eficiencia en la compra y distribución de medicamentos, situación en la práctica muestra muchos problemas.

Estos logros están aún por verse, después de diversas intentonas falladas con experimentos previos que pasaron por el casi extinto Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), así como compras a través de la UNOPS entre 2020 y 2022, en realidad han dejado un sistema de salud que ciertamente cargaba diversos problemas previos al actual gobierno, los desatinos agudizaron la falta de atención oportuna y con elevados costos al mismo sistema público de salud, como al bolsillo de los pacientes.

En sus propuestas destaca:

  • Construir consultorios en 154 municipios que aún no cuentan con ellos, priorizando aquellos con alta y muy alta marginación.
  • Disminuir las diferencias territoriales en el acceso a la salud mediante la construcción de unidades de salud en “desiertos de cobertura”, es decir, aquellas poblaciones donde puede tomar más de dos horas en llegar a una unidad de salud
  • Agilizar los procesos administrativos para la compra y modernización de equipo médico y la dotación de personal.
  • Garantizar al 100% el abasto de recetas y reducir los costos totales en por lo menos 10%.
  • Crear un nuevo modelo de compra que permita un abasto de medicamentos suficiente, oportuno y eficiente.
  • Fortalecer a la empresa paraestatal Laboratorios de Biológicos y Reactivos (BIRMEX) como la institución responsable de la planeación, compra y distribución de todos los medicamentos.
  • Promover una cultura de salud que incluya una dieta adecuada, ejercicio y tratamiento de adicciones.
  • Implementar esquemas masivos de teleconsulta en el primer nivel de atención.
  • Desarrollar campañas de prevención de enfermedades infecciosas y crónicas.
  • Implementar un sistema de expediente clínico electrónico compartido entre IMSS e IMSS-Bienestar, con interoperabilidad hacia el ISSSTE.
  • Garantizar la infraestructura de conectividad y el equipo de cómputo en todas las unidades de atención.

Bienestar integral

A estas propuestas se corresponden con lo que señala el documento «República Sana» donde plasma su visión sobre un modelo de gobernanza de salud y de bienestar integral para la población. La difusión de sus planteamientos durante la compaña presidencial estuvo a cargo del doctor David Kershenobich, próximo secretario de Salud.

En dicho documento se plantean tres ejes principales:

  1. Prevención y Atención Integral de la Salud: Se busca mejorar los servicios de salud y garantizar un enfoque preventivo en lugar de reactivo. Esto incluye fortalecer la infraestructura de salud, promover hábitos saludables y reducir las desigualdades en el acceso a servicios médicos. En donde contempla implementar la estrategia de “médico en tu casa” como principal medio para detección temprana de enfermedades, lograr la vacunación y garantizar la atención a adultos mayores, así como en atender de manera oportuna enfermedades crónico degenerativas y en odne ocurran condiciones de incapacidad.
  2. Bienestar Social y Económico: Se pretende implementar políticas que no solo atiendan la salud física, sino también el bienestar social y económico de las personas. Esto podría abarcar desde apoyo económico hasta programas educativos y de desarrollo comunitario.
  3. Sostenibilidad y Medio Ambiente: La propuesta también enfatiza la importancia de un entorno saludable, lo que implica acciones para enfrentar el cambio climático, promover prácticas sostenibles y asegurar un medio ambiente limpio y seguro para todos.

Enfoque integral y preventivo

La intención de “República Sana” es contar con un  enfoque integral y preventivo, que no se limite a la atención médica que de manera cotidiana se ha ocurrido.

La realidad que enfrenta el próximo gobierno es retador, máxime por los severos retrocesos observados en años previos, que han hecho “meter” toda velocidad a múltiples cambios en la relación con los estados a través del OPD IMSS Bienestar, el cual cuenta con el respaldo del IMSS, cuyo director general, Zoé Robledo,  seguirá siendo responsable y en quien se apoyará la presidenta en “consolidar” el sistema de salud, bajo condiciones de presupuestos limitados ante una expectativa de finanzas públicas deficitarias en los próximos  y que requerirá de financiamiento externo para garantizar las inversiones requeridas.

Es urgente una adecuada planeación y coordinación institucional, con asignaciones adecuadas de recursos y que se ejerzan seriamente, pues ha sido una realidad los continuos y marcados subejercicios que el sector salud ha sufrido, particularmente la Secretaría de Salud, lastimosamente.

¿Y Birmex?

Una severa preocupación de quien escribe estas líneas, es la insistencia en otorgar a la empresa paraestatal, Birmex, la responsabilidad de las compras, contratación y distribución de medicamentos y dispositivos médicos en nombre de las tres principales instituciones de salud, IMSS, ISSSTE y el OPD IMSS Bienestar (al que se suman los SESAS y los hospitales regionales), cuyas deficiencias siguen dando lugar a desabasto entre las instituciones, puede significar la principal traba para el plan de salud de la presidenta Sheinbaum.

Las capacidades de logística y distribución para atender de manera puntual a dichas instituciones, incluyendo la “última milla” para contar con los bienes terapéuticos en farmacias, en piso o quirófano hoy son insuficientes tanto en infraestructura como en personal especializado.

Atrasos en entregas

Las experiencias más recientes en el abasto en los últimos dos años bajo la responsabilidad de esta empresa, han significado atrasos en entregas a las instituciones, rechazo de cargamento a los proveedores, en donde abundan problemas de papeleo, falta de comunicación y una elevada carga de discrecionalidad para resolver en las entregas.

Bajo el modelo de “República Sana”, el control del abasto en manos de Birmex podría complicar el desempeño de instituciones que han logrado ser funcionales, como ha sido IMSS, por lo que es fundamental la revisión técnica de tan delicada labor y de su adecuada implementación, a la cual se suma, según cambios en lineamientos sobre la operación de Birmex, la responsabilidad en la compensación de medicamentos en especie y la misma puesta en marcha de las “farmacias del bienestar” en colaboración del sector privado, cuyos mecanismos no se han dado conocer y que tampoco están en el alcance de esta empresa al momento. (Véase esquema 1).

Elaborado por Instituto Farmacéutico (INEFAM).

Adjudicaciones directas

En lo que va de 2024, año en el que dicha empresa ha emitido investigaciones de mercado para compras consolidadas para dichas instituciones, se han caracterizado por ser pequeñas y dotadas de alto grado de discrecionalidad con un elevado número de adjudicaciones directas en las que no han mediado procesos apegados a la ley de adquisiciones, precisamente por las facultades otorgadas a la misma para actuar bajo excepción a la ley y que se presta para actuar de manera abusiva. Tal condición crea incertidumbre entre instituciones y proveedores, lo que se podrá acentuar en la medida que tenga bajo su responsabilidad compras de mayor envergadura.

El esquema 2 ofrece un resumen de las compras ocurridas al mes de junio, que con cifras preliminares, las cantidades adjudicadas de medicamentos como de dispositivos médicos representan el consumo de poco más de un mes (en su mejor momento, el consumo mensual de piezas de medicamentos es de 150 millones de piezas), que aun no son entregadas o carecen de contrato. Tal parece que se trata más de un proceso experimental antes que resolver las necesidades institucionales. El importe en medicamentos es solo de 18.5 mil millones de pesos, que representa menos del 20% de los importes ejercidos anualmente. En el caso de dispositivos médicos 2.75 mil millones de pesos, que representan quizá el 5 por ciento.

Elaborado por Instituto Farmacéutico (INEFAM).

Interacción con proveedores

Los objetivos y planes de la “República Sana” podrían verse comprometidos ante la continuidad en el problema del abasto al concentrar en la dicha paraestatal la totalidad de las compras de las tres principales instituciones de salud para los próximos años, lo que es del todo delicado trabajar de manera estratégica el modelo de abasto en donde podrá ser de mucho valor mayor colaboración con el sector privado en temas de logística, así como una apuesta más trabajada para el uso de tecnología que facilite la interacción con proveedores, así como las entregas en almacenes y farmacias que garanticen trazabilidad, así como acceso a la información para todas las partes con el fin de mejorar el abasto que se ha visto seriamente dañado en el presente sexenio.

Enrique Martínez

Enrique Martínez Moreno es director general de INEFAM LATAM. Su correo electrónico es: enrique.martinez@mundofarma.com.mx José Carlos Ferreyra López es presidente del INEFAM México y LATAM. Su correo es jcferreyra@mundofarma.com.mx

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