Columna Saludiario
En días recientes se dio a conocer que la Cofepris ahora estará a cargo de Hugo López-Gatell, ¿será una decisión que beneficiará o perjudicará a la salud?
En México tenemos a un súper subsecretario de la Salud, que además, entre sus tiempos libres, es vocero de la pandemia de Covid-19 del gobierno mexicano: Hugo López-Gatell. En el último tramo de agosto se le premió con 13 carteras a su cargo, entre ellas, la de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris).
Con esta medida, la Cofepris sale perdiendo. Y mucho. De 2011 hacia acá, la agencia sanitaria mexicana se había reconvertido, había eliminado el gran rezago que tenía -una bola de trámites heredados de la gestión de Miguel Ángel Toscano- y hasta se había dado el lujo de obtener varios reconocimientos internacionales, como el de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS), entre otros, que la ubicaron como agencia de referencia regional.
Sin embargo, a finales de 2018 llegó el nuevo gobierno de Andrés Manuel López Obrador, autodenominado de la 4T y la historia no fue la misma. Mucho tiene que ver, como hemos visto, con que al primer mandatario no le gustan los órganos independientes y que esta administración venía con la idea de hacer fuertes cambios para reducir la estructura gubernamental.
Un camino lleno de obstáculos
Este cambio viene aparejado con la idea de integrar a Birmex como la nueva distribuidora estatal de medicamentos, vacunas e insumos médicos. Esto no ha sido fácil, porque el camino ha estado lleno de obstáculos y escándalos, como la publicación de los videos donde aparece el hermano del primer mandatario -Pío López Obrador- y su funcionario estrella, David León Romero, entregándole dinero para la campaña, lo que es un acto ilegal a todas luces.
El gobierno de la 4T tiene la idea de comprar medicamentos en el exterior, con la falsa idea de que ahorrará en ello y evitará la corrupción. Nada más falso, pues además de que no conseguirá precios extraordinarios en otras latitudes, la OMS, que ayudará a esta administración en esa tarea, cobrará una comisión de alrededor del 4%, lo que aumentará el precio final de los fármacos.
Por si fuera poco, esos medicamentos que llegarán seguramente de China e India, entre otros países orientales, no estarán avalados por nadie, así que la Cofepris tendrá la encomienda de darles un trámite exprés.
Una pésima gestión de compra de medicamentos
Así que este necesario trámite, que antes tomaba meses, seguramente se realizará en un periodo muy corto, con tal de que los hospitales y clínicas del sector salud no sufran desabasto de medicamentos, como ha venido ocurriendo desde que llegó este gobierno por una pésima gestión de la compra de los mismos. Y si no, que les pregunten a los niños enfermos de cáncer y a sus padres, que no han dejado de denunciar esto por todos los medios posibles.
Con ello, se pondrá en serio riesgo la salud de los pacientes, que debería ser la principal preocupación de este gobierno. En este contexto, el ánimo parece ser el de sacrificar a toda una industria instalada en México, que genera empleos y paga impuestos, todo por una acusación de corrupción de la cual no se ha dado ninguna prueba ni se ha procesado a nadie.
Una gran ignorancia de la 4T
Con todo este entramado, el actual gobierno de la 4T ha demostrado una gran ignorancia de cómo funciona el sistema de salud y la industria farmacéutica que le provee los medicamentos e insumos médicos.
Como dije antes, con este cambio la Cofepris sale perdiendo, pero no solo ella, sino todos los mexicanos, quienes ahora tendremos un cada vez peor sistema de salud, al cual más nos valdrá no atendernos, al menos en el corto plazo, porque la vida está en juego.
Estetoscopio
A pesar de que la pandemia en México parece ir en un dudoso descenso, la verdad es que la situación sigue igual de preocupante: ya vamos para 70 mil muertos oficiales por Covid-19, pero el subregistro es escandaloso, porque parece ser que sería al menos el triple. De ahí que ya exista una escasez de certificados de defunción… La buena noticia, dice López-Gatell, es que ya se están imprimiendo y distribuyendo a todo el territorio nacional… ¿De verdad esto es motivo de celebración?
*Esta columna de Jorge Arturo Castillo apareció publicada el jueves 10 de septiembre de 2020 en el portal especializado para médicos Saludiario.